Nuestros ojos
se encontraban en infinitas miradas,
como dos espejos reflejándose entre si.
Las palabras
se hilaban en mi cabeza
formando versos,
mientras tu y yo
nos comíamos a besosEscuchábamos al tiempo
pasar a nuestras espaldas
pero no lo seguíamos.
Tu y yo vivíamos nuestro momento
fuera del mundo
Y ahí en ese plano onírico
me dijiste tu nombre
y yo desperté
buscándote en mi almohada.
Diego Aragón - Febrero 2014
Pintura de Marc Chagall - The Birthday (1915)
No hay comentarios:
Publicar un comentario